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Bordillos en piedra para aceras de la mejor calidad
Tanto en el ámbito público como en el privado, las aceras son elementos esenciales para el movimiento de las personas y por ello su correcta construcción resulta indispensable para prevenir accidentes o un deterioro excesivamente rápido.
En este sentido, los bordillos para acera cumplen un papel esencial, ya que no solo delimitan la propia vía sino que permiten marcar y salvar desniveles así como definir la estructura de la propia acera. Sin embargo, no todos los bordillos son iguales, ya que los materiales empleados en la fabricación de unos y otros tienen evidentes repercusiones en la calidad. A continuación se muestran las principales características que todo buen bordillo debe tener.
En primer lugar, el bordillo debe presentar una resistencia superior a la del resto de la acera ya que se trata de un elemento estructural cuyo deterioro implica también destrozos en el resto y que va a estar sometido a un ambiente mucho más agresivo. Por ello el espesor de los bordillos es mayor que el de los adoquines o baldosas que se utilizan en las aceras. La piedra se presenta como uno de los materiales que ofrecen mejores resultados en este sentido.
Bordillos de piedra, la elección ganadora
El bordillo ha de estar preparado para resistir la formación de capas de hielo en su superficie (este tipo de prevención varía según dónde se vaya a instalar la pieza). Igualmente sensible resulta la elección de los materiales para soportar lluvias intensas. Los bordillos de piedra garantizan que el agua rebote en la superficie sin deteriorarla y sin estancarse, lo que se traduce en una vida útil mucho más larga en comparación con otros materiales. Otro aspecto muy interesante es la baja resbaladicidad de la piedra que impide los resbalones incluso en caso de lluvia.
De cara a la fabricación de bordillos Taller de Cantería Olnasa ofrece distintos tipos de piedra, los cuales presentan características y aspectos distintos. El Gris Moncayo es una de las alternativas más interesantes por su baja porosidad, aunque según los gustos de cada uno puede optarse por el Rojo Moncayo (con aplicaciones muy similares pero en tonos rojizos). El Azul Pirineo y el Beige Pirineo por su parte son especialmente demandadas para pavimentar vías urbanas ya que previenen el deslizamiento y tienen una gran resistencia. Eso sí los mejores resultados estéticos los ofrece la Arenisca Uncastillo, piedra muy versátil.